Guardería O Xardín


Nos adentramos esta vez en una guardería cerrada desde hace unos años en la ciudad. Fue de las pioneras en la educación infantil pero la competencia con otras cercanas y la construcción de nuevas potencias han provocado el traslado de la misma a otra zona de la ciudad. 
El edificio, posible antiguo chalet unifamiliar reformado como guardería, ha quedado expuesto al deterioro del paso del tiempo y como no, de los vándalos. El recinto aun es grande, dispone de piscina y un gran terreno de recreo, recientemente desbrozado y accesible.
Una pena no haber llegado antes y encontrarse con algo más de material. Aun así, sus paredes decoradas y algún juguete suelto hacían recordar un poco la esencia de la guardería.
























Casa vieja a oscuras


Nos adentramos esta vez en un casa de lo más antigua. Con muebles de otra época mezclados con otros más recientes, pero ninguno se salía de llevar más de veinte años de abandono.



Había telas de araña por todos lados y por las ventanas que estaban abiertas ya penetraban las silvas hacia el interior de la casa.



Había muchas curiosidades, desde juguetes antiguos hasta cacharros ya obsoletos hoy en día, sin faltar la típica máquina de coser.

La cocina era de leña y aun conserva mucha de su loza entre una densa capa de polvo.


Como podéis ver la exploración fue en plena oscuridad. Fotos sacadas con flash y con poca visibilidad. Esto me pasó una mala jugada.

A veces te confías en un suelo que parece estable, sin humedades que puedan ablandecer la madera. En este caso el suelo estaba podrido y con ello una mala pisada terminó por hundirme la pierna hacia el sótano. Pude levantarme sin problema y la cámara que se llevo un buen golpe resistió perfectamente.
Afortunadamente todo quedó en un susto del que siempre se aprende a ser más prudente.

























momento susto:










La casa de los muebles elegantes



Sabíamos que nos adentrábamos en el recinto de una casa muy antigua, con evidentes señales de abandono, pero no esperábamos encontrarnos con tanto valor guardado.

Acceder al interior de la casa no fue nada fácil, por suerte una ventana oculta entre las hiedras estaba abierta. Una vez dentro el olor a cerrado era muy intenso y enseguida supimos que nos adentrábamos en un abandono lleno de valor.

Una pista bastante fiable para conocer la última fecha en que alguien vivió en la casa es la zona de la cocina, ver si tiene calendario, mirar fechas de caducidad, periódicos... en este caso el calendario y varias agendas indicaban del año 98. Viendo el estado de las habitaciones se corroboraba que nadie cuidaba la casa desde hace más de veinte años. Y lo más sorprendente es que parece que han dejado todo tal y como estaba, con todo el mobiliario y objetos de valor.

La mayoría de muebles estaban protegidos por sabanas. Un intento de sus propietarios por conservarlos durante algunos años de los que tendrían constancia que la casa iba a quedar deshabitada, pero.. tanto tiempo? Las sabanas protegieron durante algunos años del polvo pero con el abandono, las humedades ya afectaron considerablemente las zonas más vulnerables de la casa. Aun así, es sorprendente la calidad de todo el mobiliario, la mayoría piezas talladas a mano con logrados acabados en una madera de alto valor.

Nunca entenderé el motivo de abandonar pertenencias tan valiosas como estas pero está claro que todo es por alguna razón. Fallecimiento, herencia, falta de dinero, legalidad, insolvencia, descuido, dejadez.. solo espero que la historia termine bien para estos pedazo de muebles y no acaben debajo de un montón de escombros.