El hostal ruinoso


Este es el clásico hostal del pueblo que lleva abandonado tantos años como su historia. Hospedaba a cientos de personas atraídas por la villa termal, dando también servicio de restaurante en la planta baja. Ahora, después de tantos años sin huéspedes ni mantenimiento se a convertido en una ruina, más avanzada cada año. Esta a la espera de un plan de recuperación pero como suele pasar, el tejado acaba desplomándose antes de ser recuperado, lo que lleva casi en efecto dominó, a la caída de todo el edificio, de arriba abajo. Recorrer aquella escalera fue realmente peligroso, pero con mucho cuidado, el riesgo llevó a ver habitaciones más intactas y un poco de lo que fue este modesto hostal. Por precaución no fue explorado ni la mitad del edificio, que seguro que guarda muchas cosas en estancias ahora inaccesibles.


















Villa Teresa


Villa Teresa fue bautizada esta bonita casa, como tantas otras viviendas de la época que aun resisten ante tanto edificio.
El estado de su fachada principal no mostraba mucho aspecto de abandono pero viendo su jardín convertido en una autentica selva, indicaba que hacía muchos años que nadie pasaba por allí. Asi que una vez dentro del jardín fue abrirse paso hasta llegar a su fachada trasera, menos a la vista de posibles miradas.
Una ventana abierta y un poco de agilidad fue la clave para poder acceder al interior. La primera impresión fue brutal, ya que había un antiguo mobiliario con el aspecto decadente del moho y humedades por todos lados. Una zona del tejado estaba al descubierto y con tal motivo las humedades hacían peligrar los suelos de madera en varios tramos.
Con mucho respeto indagando por algunos escritos, deduzco que nadie pasaba por allí desde principios de los 2000, aunque según subías hacia sus dos plantas superiores te ibas encontrando con objetos y recuerdos muy antiguos.
La verdad es que poco pude averiguar sobre el nombre de “Teresa”, pero seguramente haya sido una de las generaciones que aquí vivió.






























La quinta del politico (2ª parte)


Continuamos la visita en esta quinta nobiliaria. Ya en el segundo piso, las estancias son habitaciones, baños y un pequeño salón-comedor, o eso parecía, lo cierto es que ya por el mobiliario indicaba que residía una familia adinerada, además era evidente una zona dependiente de servidumbre. Por las diferentes habitaciones había numerosos escritos muy antiguos, metidos en sobres muy bien conservados. Con calma e interés pude sacar mucha información, ya que muchos eran cartas personales o destinadas a varios familiares, relatando las herencias de cada uno. En la vivienda residió por lo menos tres generaciones de la misma familia. En su inicio vivió uno de los hijos de un prestigioso terrateniente. Este se casó con su sobrina (hija de su hermano  mayor), siguiendo una estrategia matrimonial de aquel entonces para conservar los bienes en la misma familia. Este peculiar matrimonio tuvo dos hijas, que fascinadas por el mundo de las artes y la moda se fueron a estudiar a Francia y al regresar siguieron con el legado de la familia. Los últimos años de vida en esta quinta son confusos. Por los escritos más recientes, deduzco que el lugar lleva inhabitado desde los años 80, parado en el tiempo guardando verdaderos tesoros. Completando el puzzle por internet, la historia y el olvido de esta quinta es conmovedora. Por lo menos me alegra saber que está en un lugar tranquilo, con todo a favor para conservarse muchos años más.