Cine Odeón



Esta sala fue inaugurada en 1927 con el estreno de multitud de películas de la época. Además de películas también se representaba teatro y más espectáculos alternativos. En los años 80, hasta se proyectaban películas pornográficas, época en la que la sala comenzaba su decadencia. Cerró sus puertas definitivamente en los años 90.

Ahora, tras más de veinte años en descuido, ya es una mítica sala de cine más en estado de abandono. Una de de tantas cerradas y olvidadas entre edificios modernos.

Hace unos años que ya avanzó su proyecto de remodelación para convertirlo en un centro comercial, pero las obras van realmente lentas, casi también parecen abandonadas.

La sala es realmente imponente, el techo de madera tiene un gran tragaluz que dota a la sala de claridad durante todo el día. Pocos teatros pueden gozar de esta arquitectura. Además cuenta con cuatro palcos de altura en todo su perímetro. Ideal para sacar fotos desde cualquier ángulo. Justo encima del escenario, se puede contemplar la figura de un ángel presidiendo la enorme sala.


Quien pudiera retroceder en el tiempo para poder ver uno de sus espectáculos con la sala llena de gente.































Joyas sobre ruedas


Esta colección de automóviles lleva guardada casi 20 años en un viejo garaje. Hace unos años fueron retirados sin conocer su paradero, suponiendo que serían comprados, reutilizados o incluso desguazados.
Sorprendentemente, de un día para otro, toda la colección volvió a aparecer en el mismo garaje, igual de sucios y descuidados, esperando una nueva vida. La oportunidad no se podía desaprovechar así que con sigilo la exploración fue todo un éxito. 

Hay verdaderas joyas guardadas aquí dentro, desde marcas más humildes a otras de alta gama, con el plus añadido de su antigüedad. 
Ford, Rover, Seat, Bmw, Lancia, Mercedes, Austin o Jaguars son solo algunas de las marcas que se pueden ver en este garaje parado en el tiempo. En concreto desde los años noventa por lo que pude ojear en varias fichas técnicas totalmente a la vista en los interiores, todos abiertos.

Al parecer pertenecen todos a un mismo propietario, por eso supongo que será una colección particular de automóviles clásicos. La explicación de por qué los tiene en este pésimo estado no se la encuentro. Quizás un tema de legalidad, dinero, dejadez, fallecimiento.. solo el tiempo dirá el paradero final de estos coches, para muchos, joyas sobre ruedas.