Cantera XL

Nos encanta este tipo de lugares, accesible por todos lados y sin problemas para llegar hasta el. Todo es tranquilo hasta poner el primer pie en la estructura. Obviamente antes de subirnos comprobamos que la estructura está firme, a pesar del óxido y el mal aspecto que presenta tras estar expuesta a la intemperie durante tantos años.

Con mucho cuidado, pudimos recorrer todos los tramos que recorren la estructura. Pudimos averiguar su función.

Se trata de una cantera, en la cual se extraía material del suelo para venderlo después en el sector de la construcción. En la enorme estructura de hierro se molía y separaban los materiales extraídos del suelo montañoso. Principalmente arenas o gravas. Los materiales eran transportadas en vehículos de gran tonelaje hasta aquí. Una vez depositados en silos, una serie de cintas transportadoras hacen separar y clasificar los elementos según su tamaño para luego ser vendidos.

Así funcionaba esta gravera hasta hace varios años, cuando la crisis de la construcción forzó a cesar su producción.

Tras años sin actividad, la naturaleza va recobrando su terreno, camuflando poco a poco todo entre la espesa vegetación. Las vistas desde allí arriba eran espectaculares!

La casa de la virgen

 

Por poblachos gallegos siempre encontramos casitas humildes bien conservadas, sin apenas vandalismo, solo deterioradas por el paso del tiempo. 

Esta casa desde la calle no es que llame especialmente la atención, es una fachada de piedra vieja y humilde, con ventanas de aluminio llenas de telas de araña en las que se delata el claro abandono.

Como exploradores de lugares abandonados, nos decidimos a parar e inspeccionarla. Muchas veces, en lugares humildes como este, te encuentras con grandes sorpresas. Simplemente con que el lugar tenga mobiliario conservado y únicamente alterado por el paso del tiempo, ya nos conformamos para explorarlo con fascinación.

Esta casa estaba llena de objetos de otra época, con paredes y techos llenos de moho y humedades. Una decadencia que nos encanta fotografiar. 

Como es frecuente en este tipo de casas de la época, los objetos religiosos están por todas partes, cuadros de Jesucristo, crucifijos.. y detalles que no dejan de sorprender. En una mesilla de noche una lamparita de plástico con forma de virgen, única en su especie! ; En una habitación una urna vitrina antigua de madera con la virgen dentro, llena de telas de araña disecadas, aquello solo daba mal royo, tanto que aún tengo la imagen de esa virgen rondando por mi cabeza.