La estación satelital

Este centro operacional de satélites fue inaugurado en 1977.

Pertenece a una de las primeras empresas telegráficas de primeros de siglo, construida en 1925. 

Su funcionamiento se basa gracias al inventor italiano Guillermo Marconi, que consiguió establecer comunicación a distancia por ondas radioeléctricas. Con esta técnica telegráfica se logra conectar internacionalmente ciudades como Londres, Berlín o Rio de Janeiro.

Esta estación satelital se encuentra en mitad de un verde paisaje, en el que a distancia se puede ver su impresionante antena de 30 metros de altura y 20 metro de diámetro de reflector.

La estación lleva abandonada pocos años, aunque la falta de mantenimiento se hace notar rápidamente con la densa vegetación en algunas zonas. El recinto tiene varias cámaras de seguridad desactivadas, o por lo menos eso parece. Los interiores tenían aun la alarma activada, por lo que fue el único sitio que no pude acceder, tras los cristales se podía observar una compleja maquinaria y bastante material revuelto.

Fue una aventura escalar hasta la cima de la antena, a través de escaleras llenas de verdin pero muy estables. Las vistas desde allí arriba eran inmejorables.